Capítulo 1: EL INICIO DE NUESTROS DÍAS

Bueno llegó el gran día de desvelar este nuevo relato!!!!..... Primero que nada voy a agradecer a Naty por dejarme participar en este fic que es muy especial y que se a convertido en un proyecto muy hermoso y que hace que me enamore mas de robsten y sus locuras de amor. (Sarita)


Queremos agradecer tambien a Jofo, ella también fue parte del comienzo  de esta locura pero por cosas que suceden ya no continua con nosotras, solo les queremos decir, muchas gracias por lo que aportaste y por el tiempo que le dedicaste.


A Carla por todas la imagenes que nos envían siempre, ayudan mucho a mí imaginación cuando se encuentra al borde del colapso (Naty).


Por otra parte, a las chicas del chat del  blog la saga robsten  y al blog mismo...... Las amamoooossss a todas lo saben, no vamos a decir nombres, pero cada una de ellas sea vuelto muy importante para nosotras....... las queremos mucho y esperamos que el fic les guste tanto como nosotras disfrutamos haciendolo........ y pues sin mas disfruten el primer capitulo.

MUCHAS GRACIAS!!!  (Sarita y Naty)

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Rpov

El amor es un camino largo para recorrer, hasta alcanzar lo que uno desea más que nada en esta vida. Yo por algún designo de Dios, tuve el placer de conocer a esa persona que aún, a pesar de los años, hace que mi corazón brinque de alegría al despertar cada mañana a mí lado; mi hermosa Kristen.

Esa niña que conocí hace siete años atrás viendo la película Into the Wild, me atrapo con sus verdes ojos felinos y término atándome a ella un año más tarde cuando trabajamos juntos en la saga Twilight.

Parece que fue ayer, que crucé medio continente para una prueba con Kiki; con solo besarla terminé en el piso con una vergonzosa erección que ocultar y con la convicción que ella seria mía. Lo que no tenia en cuenta era que ella solo tenía diecisiete años y un novio a cuesta; el solo recordarlo me da urticaria.

-  Bueno al final no entiendo porque discutieron nuevamente- Tom me trajo a la realidad.

-  Porque la encontré hablando con él por teléfono- dije mientras bebía mi tercera cerveza.

-  Creo que los celos te ciegan  hermano- negó con la cabeza- Después de tantos años seguís con tus inseguridades; ella es tuya, es tu esposa por el amor de Dios. Deberían estar revolcándose como desquiciados, igual como lo hacían en el pasado y no buscando pleito todos los benditos días- bufó.

-  Es que... perdí la razón cuando la oí reírse con su llamada. ¿Qué tiene de gracioso el enano de circo? ¿Por qué siempre la está buscando? ¿A caso no entiende que ella es mía, mía?- ya estaba rojo de furia.

-  Ahí es en donde te equivocas- tocó con un dedo mi cabeza.

-  No te sigo Tom- le quité el dedo.

-  Ella no es tu propiedad, no es un objeto que le sacaste a Mike. Ella es tú esposa, tú amante, tú amiga y por sobre todas las cosas es una persona- aunque me gustaría negarlo, Tom tenía razón- Parece que a ustedes el casarse les hizo peor, en vez de buscar la forma de agrandarla, están empeñados a achicarla- rió medio borracho, yo solo baje la mirada- Voy a buscar otra cerveza ¿Te traigo otra o ya regresas a casa?

-  Tráeme otra; seguramente Kristen sigue hecha una furia, si es que todavía no me tiro todas las cosas a la calle.- mientras mi amigo se aleja hacia la barra me quedé soñando en lo maravilloso que fue el día que al fin fue mi esposa.

Flash Back

-  Un hermoso día para casarse- comentó mí padre Richard, mientras acomodaba mi corbata.

-  Todavía no puedo creer que luego de llover tres días seguidos, hoy allá salido el sol- sonreí viendo el ventanal del hotel donde nos hospedábamos, ya que la casa que compramos en las fiestas pasadas estaba ocupada por todas las mujeres de ambas familias y a los hombres nos toco retirarnos sin replicar- ¿Qué hora es?- pregunte ansioso.

-  Van a ser las cinco, todavía falta hijo- palmeó mi espalda- ¿Porqué no bajamos al bar a tomar una copa antes de la fiesta.

-  Si llego borracho, Kristen me va a ahorcar con el ramo, ya me lo advirtió- mi padre se reía- Llegar tarde o borracho = ahorcado, así me aclaró anoche antes de despedirnos- los dos estallamos de la risa por mi patética imitación de su voz.

- Jajajaja... todavía no estas casado y ya te tiene totalmente controlado- negó con la cabeza- Te espera un largo camino...

-  No va ser más duro de lo que ya vivimos hasta aquí. Si ya peleamos tanto por proteger nuestro, no creo que soportar su carácter sea para tanto- me encogí de hombros.

- Mira hijo, yo más que nadie se cuanto sufriste por ella; mejor dicho como ambos, desde sus lugares, sufrieron por eso nunca te des por vencido cuando las cosas se pongan difíciles. Porque mas allá del amor que ambos se profesan, siempre va ver cosas que querrán separarlos, más en el mundo donde ustedes trabajan- Sostuvo mi hombro- Recuerda esté día, recuerda que es lo que te enamoró de ella desde el primer instante, y todo lo que caminaron juntos; entonces la balanza siempre te dará a favor cuando quieras bajar los brazos- las palabras de mi padre me estaban por hacer llorar.

-  Gracias papá, gracias- lo abracé.- Vamos al bar, creo que una copa no me vendría mal- sonreí.

-  Tú última copa como hombre soltero- comentó en tono de broma.

-  Es lo que más deseo en este mundo- sonreí, mientras dejábamos la habitación rumbo al bar.

Fin de flash back.

-  De nuevo perdiéndote en tus recuerdos- llegó Tom junto con dos cervezas.

-  Solo recordaba las palabras de mi papá el día de nuestro casamiento sobre no bajar los brazos- suspiré

-  ¿Van a bajar los brazos?- me interrogó.

-  La verdad ya no se como seguir- me cubrí la cara con las manos- Desde hace unos meses lo único que hacemos es discutir; ya perdí la cuenta de la última vez que estuvimos juntos.

-  No pensé que venían tan mal- tomó un sorbo- Si prueban irse unos días lejos, para relajarse y disfrutar un rato. Luego del incidente, ambos no hacen más que trabajar; en especial Kristen. No les va a venir mal unos días lejos.

-  Si no es mala idea- me quedé pensado- puedo pedir una semana en el set y Kiki ahora solo anda escribiendo, creo que puede acomodar su agenda- sonreí esperanzado.

- Si vayan y disfruten su tiempo solas. Aprovechen para hablar de una vez por todas sobre la perdida, eso es lo que los está matando a ambos- asentí- ¿Sabes donde ir?

Isla Wight- dijo con afirmación.

-  Que raro- negó con la cabeza- Con todo el dinero que ambos tienen siempre terminan en la misma casita.- ambos reímos.

En ese lugar pasé el momento más magnífico de mi vida...

Flash  Back

Seis de la tarde; una leve brisa corría sobre el patio de la casona que habíamos alquilado para llevar a cabo la boda. Kristen no deseaba algo grande, solo estaban invitados nuestros familiares y amigos más cercanos; esos que estuvieron con nosotros en las buenas y en las malas.

No habíamos avisado a nadie de la prensa, queríamos paz en nuestro día. Así que aprovechamos el fin de semana largo por el cuatro de julio y nos escapamos hacia Londres.

Organizamos todo en un mes, gracias a la ayuda de mis hermanas que estuvieron encantadas en ayudar con todo. Me recordaron tanto a Alice, armando la boda de Bella y Edward.

Así que finalmente acá me encontraba, un tres de julio del dos mil doce; frente un altar, con la mirada de todos nuestros seres amados, esperando ansioso el ingreso de mi ángel.

Tranquilo hijo ya va a llegar- me susurró mi madre al oído- Yo misma me encargué de verificar que subiera al auto.- me guiñó el ojo- Salvo que se halla escapado con el chofer, dudo que no se presente- estaba por responderle que su chiste no me hizo ninguna gracias cuando escuché los acorde de Somewhere over the rainbow (http://www.youtube.com/watch?v=V1bFr2SWP1I), la canción que ella eligió para entrar ya que no deseaba entrar con las clásicas que siempre se utilizaban.

Me gire para verla y quedé totalmente embelesado. Kristen venía hacia el altar, acompañada de su padre John. Nunca la vi brillar tanto como hoy; sus ojos verdes irradiaban una luminosidad que lograba que mi corazón saltara de alegría. No me quitó los ojos de encima en todo su trayecto.

-  Ahora es toda tuya hijo, cuídala, es mi mayor tesoro- me dijo John cuando me la entregó; de la emoción, solo logré asentir.

-  Estas hermosa- le susurré- Te amo

- Y yo a ti- me apretó fuerte la mano, antes del que el pastor comenzara con la ceremonia.

Fue algo muy sencilla y clásica, se dijeron las misma palabras que hace siglos se prodigan las parejas al casarse, lo único que pedimos de diferente es poder decir nuestros propios votos. Había llegado el momento, de fondo, muy suavemente, la canción Beside you ( http://www.youtube.com/watch?v=8k-sTG7dRsk&feature=related), se oía.

- Chicos, sus votos- nos pidió el pastor. Era mí momento, saqué un papel donde había anotado algunas cosas para no olvidarme.

-  Kristen, mi Kiki... cada una de las palabras que existen en este mundo serían pocas para describir el amor y devoción que siento por ti. Se que más de una vez soy un pesado, celoso, maniático- la risa de todos se escuchó- Pero es el temor de perderte lo que me hace actuar así; porque eres demasiada persona para mí. Aún me pregunto que es lo que te atrae de mí o que habré hecho en mi vida pasada para merecerte a mi lado. Te amo como nunca ame a nadie; desde el momento que te vi detrás de un pantalla algo en ti me atrajo y no hay día que no agradezca a Stephenie por hacer una película de sus libros, porque gracias a esa maravillosa historia de amor, nosotros pudimos crear y vivir la nuestra- besé su mano- Prometo estar siempre a tu lado, ser tu fiel amigo, compañero y amante. Velare porque siempre halla una sonrisa en tu rostro, secaré cada una de las lágrimas que derrames y te acompañaré hasta el momento te nos toque reunirnos nuevamente en otro plano terrenal. Porque aún, donde quiera que uno vaya cuando muera, te seguiré amando- sequé una lágrima que caía por su rostro.

-  Ro-bert... mi fiel Rob- sus palabras salían entre cortadas- Estuve toda la noche pensado que poder decirte; tú sabes lo que me cuesta demostrar con palabras mis sentimientos hacia ti y lo único que se me venía en mente es cuan agradecida me siento porque nunca te diste por vencido conmigo. Si no fuera por tu terquees hoy no estaríamos aquí- acarició mi rostro- Gracias por abrirme los ojos y enseñarme el significado de amar a una persona; por tu paciencia a todas mis idas y vueltas; por el amor infinito que siempre me profesas sin buscar nada a cambio. Sin ti yo no sería la mitad de la mujer que hoy me convertí- paro un momento para respirar hondo y calmar sus lágrimas- Te amo más que nada en esta vida, yo soy la que me pregunto que es lo que te atrae de mí, pudiendo tener mejores mujeres a tu lado me preferiste a mí, a tú chica bajita y pecosa- ambos sonreímos- Te prometo que lucharé todos los días que me de la vida para poder hacerte feliz, te daré esa familia que tanto sueñas y terminares nuestros días, ambos canosos, tomando té en el porche viendo a nuestros nietos jugar, hasta que el Señor nos llamé a ambos a su lado y aún ahí te seguiré amando. Porque tú eres mí Universo, mí Sol, mí vida. Te amo- ambos nos abrasamos calmándonos mutuamente las lágrimas que surcaban nuestros rostros.

-  Robert Thomas Pattinson, aceptas a Kristen Jaymes Stweart como tú legitima esposa para amarla y respetarla tanto en la salud como en la enfermedad, en la riqueza como en la pobreza, hasta que la muerte los separé.

-  Si aceptó- contesté sin quitar mi mirada de ella.

-  Kristen Jaymes Stweart, aceptas a Robert Thomas Pattinson como tú legitimo esposo para amarlo y respetarlo tanto en la salud como en la enfermedad, en la riqueza como en la pobreza, hasta que la muerte los separé.

- Sí acepto- sus ojos brillaban de la emoción.

-  Ahora colóquense estos anillos como símbolo de su amor- así lo hicimos.

-  Lo que Dios a unido en el cielo, él hombre no lo separe en la tierra. Los declaro marido y mujer.- esas dos palabras me llenaron de orgullo, al fin era completamente mía- Puede besar a la novia.- sellamos nuestro pacto con un gran beso y el aplauso de todos de fondo.

Fin de flash back.

-  Entonces... ¿este fin de semana a la isla?- asentí- ¿Me quedo con los chicos o se los llevan?

-  Creo que no te hará mal quedarte con ellos unos días, ya extrañan al buen tío Tom- dije en broma.

-  Si me rompen otra vez la cama la pagan ustedes- me dijo enojado.

- Nala era aún una cachorra y Bear siempre fue un salvaje- hablé riéndome, al recordar como le comieron las patas de la cama, cuando quedaron a su cuidado al irnos de luna de miel- miré el reloj, daban pasadas las once- Va ser mejore que me marche, si es que no quiero dormir en la cucha de los chicos- me levanté a ponerme mi campera negra.

- Mañana me llamas para saber que tal te fue- asentí- Escúchala y... vayan a tener sexo de reconciliación- he hizo la mímica de estar disfrutando al máximo del sexo.

-  Eres un imbecil- le arroje una servilleta.

-  Pero igual me amas- rodé los ojos.

-  Buenas noches, Tom... gracias por escuchar- palmeé su hombro.

-  Cuando quieres hombre, cuando quieras- y me fui del lugar.

Camino a casa paré a comprar un ramo de flores; no me vendría mal llevar una ofrenda de paz.

Luego de casarnos decidimos tener como residencia fija Londres, ya que era más tranquilo y podíamos llevar una vida casi “normal”. Compramos una gran casa en Barnes, a unas seis cuadras de donde yo viví toda mí infancia y parte de mí adolescencia; así era más fácil para mis padres cuidarla cuando viajábamos por el mundo. Era de dos pisos, seis habitaciones, ocho baños, una gran sala de estar, una cocina con el mejor equipamiento para disfrutar de las delicias que cocinaba mi Kiki y un gran patio, que por ahora era disfrutado por nuestros dos perros y Jella, pero que deseaba que en un futuro no muy lejano haya niños corriendo por ahí.

Al entrar a casa, se escuchaba un gran silencio, ni Nala o Bear me vinieron a recibir; lo que significaba que estaban al lado de Kristen. Siempre que peleábamos los dos tomaban partido por ella y a mí ni se me acercaban; un día hasta me llegaron a gruñir cuando me quise acercar a su lado.

Estaba todo medio oscuro, y no sabía si tomármelo como buena señal o mala. Me fije en el living y cocina, sin hallar señales de vida. Fui subiendo las escaleras con cuidado; quizás Kristen se quedo dormida y era preferible no hacer ruido, mañana le pediría disculpas.

Al llegar hasta nuestra habitación, observé que había luz por debajo de la puerta, pero nunca me llegué a imaginar lo que estaba a punto de presenciar al abrir la puerta.

- ¡Por favor no lo hagas!- le imploré a Kristen, antes de que cometiera una locura.

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Bueno aquí termina el primer capítulo:D ..... En verdad esperamos que sea de su agrado esta nueva locura en la que nos embarcamos con Sarita, tenga un poco de paciencia que va ir tomando clima con el transcurso.

Se aceptan comentarios y pedidos de cosas que le gustaría que estén escritas, yo luego veo como mi mente de las ingenia para transcribirlas. Además eso nos ayuda a mejorar la calidad del relato.

Esperamos actualizar cada 15 días, me encantaría hacerlo antes pero tanto como Sarita y yo tenemos muchas ocupaciones entre el trabajo, hospital y universidad; cualquier cosas que nos atrasemos más por X circunstancias les avisaremos :)

Nuevamente un gran agredecimento a las chicas del Chat y al Blog de La Saga Robsten, por todo el apoyo a este proyecto.

Nos despedimos hasta dentro de 15 días donde develaremos que locura estaba por cometer Kristen ¿Ustedes qué creen que es?....Se abren las apuestas!!!!!

Besos

Sarita y Naty