Capitulo 3: El lobo vestido de cordero.

Bpov

Estaba marchando rumbo a mi casa en el auto de Jake. Él me estaba comentando sobre algo pero mi mente estaba en otro sitio, más precisamente en la discusión que había tenia minutos atrás con Kate. No puedo decir que nunca habíamos discutido, porque seria una mentira, la realidad es que más de una vez peleábamos a causa de nuestro fuerte carácter, pero la verdad es que estaba herida por sus palabras. Nunca sentí o me pareció ver que le desagradaba tanto Jacob. Sí el había cambiado un poco este último tiempo, pero era todo porque todavía no se adaptaba del todo a su nueva vida, yo sabia que solo era tener un poco de paciencia, que pasara la tormenta y todo volvería a ser como antes. Estaba tan inmersa en mis pensamientos y viendo la forma de arreglar las cosas con Kate que no me percate que ya nos encontrábamos en mi hogar.

- Mi amor ya llegamos... Bells llegamos... Bella, Bella... ¡Maldita seas ya llegamos! – me grito mientras me apretaba con fuerza el brazo.

- ¡Ay Jacob, me lastimas, suéltame!- le dije con cara de pánico; me asustaba cuando me apretaba de esa manera, porque obviamente por su contextura él tenia mas fuerza que yo y además me marcaba de la nada.

- Es que hace rato que te estoy llamando, y tú como siempre pensando en cualquier cosa antes de prestarme atención. Estoy más que seguro que no me escuchaste ni una de las palabras que te estuve diciendo desde que entraste a este auto. ¡ESTOY HARTO DE QUE NUNCA ME ESCUCHES!!!- de nuevo la había embarrado y estaba enojado otra vez. Pero con su actitud solo hizo que yo me encabronara más de lo que ya me había dejado Kate.

- No eres el único con problemas Jacob, sabes. Yo también tengo mil problemas en mi vida y no te ando gritando y ejerciendo mas fuerza de la común para que me prestes atención. Es mas hace cuanto no escuchas mis problemas ¿eh? Estoy harta de tu actitud, creo que merezco mucho más de tu parte por todo lo que hago por vos y por tu familia.

- Ahora la princesa tiene problemas- hablo en tono de burla lo que me exaspero aun mas- Haber cariño que te paso ahora, no estaba el vestido que te gustaba o mejor aun no había turno en el spa, seguramente cualquier inconveniente papi lo va a solucionar ¿no?- no termino de hablar y mi mano fue a parar a su rostro. Abrí la puerta del auto y salí hecha una furia hacia las rejas que me separaban de mi casa. Esta vez se pasó; quien se creía para hablarme de esa forma, tratándome como una persona fría y frívola, él sabia que eso solo era una pantalla para la sociedad en la que nos movíamos. No termine de cerrar las rejas que él ya estaba detrás de la misma, implorando perdón.

- Bella, bebé, perdona, me pase con lo que te dije, juro que no era mi intención lastimarte. Se que reaccione mal, pero entiéndeme hoy mi día fue un asco y termine desquitándome contigo. En verdad lo siento, por favor abre las rejas y hablemos tranquilos en tu casa, juro por nuestro amor que te voy a escuchar y que no me voy a enfadar más. Por favor ábreme, vida de mi alma.- su cara cuando me suplicaba me partía en dos y me era muy difícil mantener mi actitud de enojada; y nuevamente lo perdone abriendo las rejas de mi casa.

- Jacob no podemos seguir de esta forma ¿Te das cuenta?, últimamente no hacemos otra cosa que discutir y terminar gritándonos. Nosotros no éramos así... vos no eras así- baje la mirada al suelo apretando fuerte mis ojos y evitar que las lagrimas se me escaparan.

- Mi amor lo siento- se acerco y me abrazó muy fuerte, sintiendo el calor de su cuerpo y su corazón latiendo muy rápido, mientras que con su mano me levantaba el mentón para poder darme un beso, que ya no tenia un tinte dulce sino que era avasallante y fogoso, separándonos cuando ya no podíamos respirar- En verdad lo siento, prometo que voy a controlar mis impulsos y no descargarlos con vos.

- Eso ya me lo dijiste antes y siempre es lo mismo, en verdad mi paciencia tiene un límite. Además no me gusta cuando me aprietas fuerte.- baje la mirada al piso.

- ¿No me vas a perdonar nunca lo del otro día verdad?- el solo recordarlo se me helaba la piel- Bella te dije que lo que paso solo fue un arranque de furia, jamás me atrevería a levantarte la mano nuevamente, ¿Crees que no me sentí una basura cuando recobre la calma y me di cuenta lo que fui capaz de hacerte? Mi frágil princesa yo nunca te lastimaría de nuevo, nunca.- su vos pareció compungida y sincera.

- Ya olvide lo del otro día, mejor entremos que ya esta refrescando- mentí. Me puse de puntitas de pie para darle un casto beso.

- Íbamos tomado de la mano caminando el pasillo que separaba la casa de las rejas de la entrada, el trayecto estaba lleno de flores de las plantas que mi mamá junto con Zafrina, la ama de llaves y una segunda mamá para todos, se encargaban de mantener.

- Toma una flor para la más bonita- me dio un jazmín arrancado de uno de los canteros

- Mamá te va a matar si se entera que andas arrancando su flores, sabes que detesta que las arranquen así- era increíble como de un minuto para el otro pasaba de ser el peor de los monstruos al ángel del que me había enamorado.

- Nunca se dio cuenta que siempre se las arranco y eso ya hace tres años, y dentro de unas semanas ya van a ser cuatro, paso rápido el tiempo ¿no?

- Si paso rápido- ingresamos casa. Se sentía el aroma de las flores que seguramente corto Zafrina hoy a la mañana mezclado con el olor a la cena que se estaba cocinando, y de fondo se escuchaba un melodía de piano, donde seguramente se encontraba una personita- Ven vamos a saludarla- caminamos hasta que llegamos al living aún tomados de la mano.

- Hola enana, ¿Como te fue en el colegio?- no termine de decir mis palabras cuando mi perra Penny se levanto de al lado de mi hermana y se acerco corriendo a saludarme- Ya basta gorda, me vas a llenar de baba el uniforme y mamá se va a enojar después- no paraba de saltarme de un lado a otro mientras me ladraba.

- No me gusta que me digas enana, porque no lo soy, solo soy más bajita que ustedes pero el doctor dijo que mi estatura es normal- dijo inflando sus cachetitos pecosos y doblando el labio inferior- Y me fue bien en el colegio. También ganamos el partido frente a las chicas del Mater, tenias que verlas, las liquidamos.

- Me alegro mucho y siento no haber podido escaparme para ver el partido pero a nosotras nos retuvieron mas de la cuenta para prepararnos para la final, igual sabia que ibas a ganar, yo te enseñe a jugar- podía pelear por muchas cosas con Kristen, pero si algo compartíamos era el amor hockey y yo le había enseñado a ser una buena capitana.

- Hola Kiki hacia mucho que no te venia, en verdad creciste, me agrada tu nuevo corte de pelo.

- Bella dijiste algo sobre mi pelo, o fue el viento el que hizo un sonido- mi hermana no soportaba a Jake y siempre se hacia la tonta cuando no estaban mis papas presentes y no prestaba atención cuando él hablaba

- ¡Kristen! Porque eres tan maleducada, el no te dijo nada malo, podrías contestarle bien como mínimo.

- Mejor me voy a mi habitación, tengo tarea pendiente y no quiero que por culpa de un extraño mañana me pongan mala nota, vamos Penny, vayamos arriba haber si todavía te secuestran – salió corriendo hacia la escalera para llegar a su cuarto.

- ¡Kristen Swan! No te vayas corriendo sin pedir disculpas- odia cuando se comportaba como una mocosa malcriada.

- Déjala Bella, parece que nunca me voy a ganar su cariño, espero solamente que el día de nuestro casamiento, no prenda fuego la iglesia para impedir que nos unamos.

- Jajajajaja mira que tonterías decís, además para eso falta mucho, quizás para ese entonces ustedes se logren llevar mejor- el imaginar la situación de Kiki prendiendo fuego la iglesia no la veía tan descabellada, hasta creo que Kate la ayudaría a incendiarla si eso impedía que me casara con Jake, igual hablar de eso era soñar demasiado porque faltaba muchos años para que yo me casara.

- Tal vez no tanto como crees- me tomo de la mano y me llevo hasta el sillón de dos cuerpos que se encontraba frente nuestro- Desde hace un tiempo estoy pensando, que ya llevamos cuatro años juntos...

- Son tres años juntos- le corte y por dentro el miedo a lo que estuviera por decirme me invadía.

- Que en pocas semanas se convertirán en cuatro- me corrigió- Llevamos mas que muchas parejas en la actualidad y ambos nos amamos y no tenemos sueños en compartir la vida con otras personas que no seamos nosotros. Así que el casamiento es algo que tarde o temprano va ser un paso que tendremos que dar y para que estar esperando si lo podemos hacer ahora.

- ¡Me estas diciendo que te quieres casar conmigo ahora!- grite asustada por la envergadura de esa proposición, soltándome de su mano. Yo definitivamente no estaba lista para casarme, menos con diecisiete años. Yo quería ir a la universidad, trabajar, viajar, vivir sola y recién después formar una familia y no se porque en ese momento mi imagen de una familia no me apareció junto a él, solo vi niños corriendo en un jardín pero estos no se parecían nada a él. Tenían pelo cobrizo y castaño igual al mío.

- Ahora no cielo, sino dentro de unos meses después que termines la secundaria. Ya se que organizar lleva su tiempo pero podríamos contratar a alguien que te ayude así al entrar a la universidad no lo harías como Isabella Swan sino como Isabella Black- en ese momento creo que perdí el conocimiento, porque lo siguiente que recuerdo es a mi nana Zafrina poniéndome un algodón con alcohol cerca de la nariz para recobrar mi conocimiento.

- Bella, mi niña ¿Se encuentra bien?- ni nana preocupada como siempre, mis hermanos y yo somos como sus hijos adoptivos.

- Si mi nana, solo me bajo un poco la presión, debe ser porque no almorcé mucho hoy y tengo hambre.- mentí, no le podía decir que me asusto la idea de verme casada en pocos meses con Jacob.

- Ahora mismo te preparo un caldo mientras se termina de preparar la cena. ¿El joven Black se va a quedar?

- No hoy no puedo, quede en cenar con mi papá, será la próxima, pero gracias por la invitación.

- Porque mejor no va a su habitación a recostarse y yo enseguida subo con el caldo- asentí con la cabeza mientras ella se dirigía a la cocina. Jacob me cargo hasta mi habitación, una vez que entramos me recostó en la cama y cerro la puerta.

- Tanto te asusta casarte conmigo como para desmayarte. Pensé que me amabas, creo que me equivoque...- su vos era triste y en ese momento me sentí la peor basura por no querer unir mi vida con la suya. Me levante, aún un poco mareada, me acerque y lo abrace por la espalda.

- Sabes que te amo, solo es que me sorprendió tu propuesta, no me lo esperaba, no pensé que ya querías casarte y formar una familia, nunca pareció importarte.- intente expresarme lo mejor que pude para evitar lastimarlo.

- Pero ahora si Bella. Este último tiempo perdí muchas cosas y no quiero perderte cielo.- me beso- Se que no te he tratado apropiadamente este ultimo tiempo y temo perderte.- decía mientras me besaba el cuello y sus manos comenzaron a acariciar mi cuerpo- Solo quiero dar este paso para demostrarte cuanto te amo y que nunca mas te lastimaría, mi vida sin vos no es nada mi Bella.- en ese momento mi mente no podía coordinar dos cosas seguidas, y el aprovecho mi debilidad y me llevo hasta la cama acomodándose arriba mío, mientras una de sus manos acariciaba uno de mis senos y la otra recorría mi pierna hasta llegar a mi intimidad, la cual empezó a tocar y fue cuando mi mente volvió y pude reaccionar.

- Jake por favor ahora no, no me siento bien.- intentaba correrlo, tenía muchas cosas en mi cabeza como pensar en tener sexo. Era algo que hace bastante no disfrutaba, las últimas veces fingí para no herirlo, y no tener otra discusión.

- Bella hace mucho que no te tengo, no te siento.- dijo jadeando y más que excitado, mientras me besaba el cuello bajando sus labios hasta mis pechos para ver si lograba que cediera.

- Por favor mi hermana esta en el cuarto de al lado, y Zafrina esta por subir no podemos.- y de nuevo intente zafarme pero solo logre que el se acomodara mejor y pude sentir su ya mas que evidente erección. Entonces como mandado del cielo alguien golpeo la puerta.

- Mi niña Bella, puedo pasar acá. Te traigo su caldo.- amaba a mi nana, me salvo de tener sexo un poco forzado, porque no tenia ni la más mínima ganas de entregarme a él. Jake se reincorporo rápido y un poco enojado por no haber podido saciar sus ganas, yo me acomodé mi camisa y mi pelo.

- Si nana pasa.- abrió la puerta y apoyo la bandeja donde traía mi caldo con un jugo a un costado de mi cama.

- Coma un poco y luego descanse, así recuperara las fuerzas- me acaricio el pelo y me dio un beso en la frente- No quiero entrometerme pero seria mejor que el joven Black se marchara así se relaja mas y se recupera rápido- miro a Jacob con cara de pocos amigos y luego me guiño el ojo. Seguramente había escuchado mis no ante las ganas de mi novio.

- Si creo que es mejor, además en una hora me tengo que juntar con mi papá, tengo el tiempo justo para llegar a mi casa, bañarme y salir hacia el restaurante. Te llamo mas tarde mi vida, para ver como seguís- y me di un beso, el cual quiso profundizar más pero yo no se lo permití.

- Adiós Jake, saluda a Billy de mi parte, dile que lo extraño.

- Si se lo diré. Hasta luego Zafrina.

- Lo acompaño a la puerta joven- Zafrina me beso de nuevo la frente y acompaño a Jake hasta la salida. Tome mi caldo y me recosté, justo cuando iba a cerrar los ojos Penélope abrió la puerta, se subió a la cama y se recostó al lado mío.

- Hoy fue un día muy complicado- comente mientras le acariciaba la cabeza- ¿Siempre me vas a cuidar, verdad?- ella ladro como contestándome. Puede que este un poco loca por hablarle de esta forma a un perro, pero necesitaba que alguien me cuidara, al menos por hoy. Me sentía a la deriva de todo, ya no podía controlar nada. Cerré mis ojos y caí en los brazos de Morfeo, donde volví a soñar con esos niños de pelo cobrizo.

Jpov

Bajaba las escalares de la mansión Swan escoltado por Zafrina. Me encontraba mas que frustrado, porque no me pude quitar las ganas con Bella aunque ella no quería tener relaciones sabia que no se iba a negar a satisfacerme un rato, pero tuvieron que tocar la maldita puerta y todo se fue al demonio.

Por otro lado tenia que convencerla para que aceptara casarse conmigo pronto, así podría tener parte se su herencia. Por lo que note no le gusto mucho la idea de compartir una vida junto a mi, tendría que calmarme y no alterarme mas, ser el de antes así me daría el sí fácilmente. No tenia mucho tiempo a mi favor, era con ella o con ninguna, porque una vez que metan preso a mi papá por el fraude que cometió con la empresa, será imposible que una niña mimada me haga caso, así que tengo que cuidar mi única salvación.

Una vez fuera de la casa mientras me dirigía al auto iba pensando un segundo plan para que Bella no se negara a casarse, y en ese momento se me ilumino la mente, pensando que si ella quedara embarazada la obligarían que aceptara el matrimonio para que no hablaran mal de su persona. Total ella se haría cargo del crió una vez que nazca, de última contrataba una niñera y asunto resuelto. Bella seria mi esposa por las buenas o por las malas, pero esa mocosa no se me escapaba.

Y hablando de niñeras, no me iba a quedar con las ganas atravesadas, así que una vez en el auto, manejando hacia mi casa, tomé mi celular y marque el número de alguien que seguramente estaría mas que dispuesta a calmar mi ansiedad.

- Jess dulzura mía ¿estas ocupada, porque me siento solito y necesito que me hagas compañía y juegues un ratito con mi amigo?

Bpov

Pasaron dos días desde la pelea con Kate y de la proposición de Jake. Las cosas con Kate eran distantes pero no volvimos a tocar el tema, hasta creería que estaban tramando algo junto Alice. A Jacob no lo volví a ver porque me dijo que estaba ocupado con unos exámenes, pero nos hablábamos siempre por teléfono y gracias a Dios no discutimos más.

Estaba en la biblioteca de mi casa buscando un libro que necesitaba para un trabajo de literatura de la escuela, cuando mi papá entro.

- Mery dulzura ¿Cómo estás?- pregunto mientras me daba un beso sobre mi cabeza.

- Muy bien papi, aquí buscando un libro para un trabajo que tengo que hacer. ¿Cómo te fue en el trabajo?

- Bien aunque estoy agotado; surgió un problema con la distribuidora en Londres y tengo que viajar mañana a primera hora. Voy a estar fuera todo el fin de semana- comento mientras se sentaba en su escritorio y sacaba unos papeles de su portafolio.

- Londres – suspiré- Hace tanto que no voy allá... Extraño un motón a nana Sue y a los chicos, hace mas de un mes que no hablo con ellos- en verdad extrañaba Londres, desde las vacaciones por las fiestas no pisaba esa ciudad. Era mi lugar favorito en el mundo.

- Si tanto extrañas estar allá eso se soluciona muy fácil.- expreso con una sonrisa en su cara.

- A sí ¿y cuál sería la solución?- mire incrédula hacia mi papá

- Muy sencillo. Mi pequeña damita ¿Aceptaría acompañar a su viejo padre a un viaje de negocios y de esa forma hacerlo más placentero?- no podía creer lo que acababa de escuchar, me estaba pidiendo que lo acompañara. No lo dude ni un minuto, salté sobre su regazo abrazándolo muy fuerte y llenándolo de besos.

- ¡Papi te adoro!- lo abracé aún más fuerte.

- Eso significa un sí ¿cierto?- él también me abrazó fuerte.

- Claro que es un sí, ya mismo me pongo a preparar las valijas. Hay que avisarle a nana Sue que prepare mi habitación- con toda la emoción de viajar olvide que estábamos a miércoles y tenía que asistir al colegio- ¿Papá que voy a hacer con la escuela? ¿Mamá que va a decir de esto, me dejará ir?- estaba entrando en pánico, al darme cuenta que quizás no podría ir.

- No te preocupes por nada cielo, yo me encargo de avisar al colegio, de llamar a Sue para que prepare tu habitación y convencer a tu mamá. Lo único que tienes que hacer ahora es ir a empacar, que partimos mañana a primera hora, así puedes disfrutar más.- me dio un beso en la frente y palmeó cariñosamente mis nalgas para que me levantara de su regazo y fuera a preparar todo.

- ¡Eres el mejor papá del mundo, te adoro!- lo besé por ultima vez mientras corría hacia mi habitación para preparar todo. Pude escuchar su risita cuando deje la biblioteca.

Este viaje no podía llegar en mejor momento. Serviría para cambiar el aire, renovar fuerzas, divertirme sin tener que pedirle permiso a nadie ni tener que andar cuidándome sobre mis actitudes, y sobre todo para pensar sobre como seguiría mi relación con Jake.

No es que no lo amara más, pero la última conversación que tuvimos, me dejó pensando que tal vez él necesitaba otra clase de mujer a su lado, una que quisiera formar esa familia que el supuestamente quería, algo que todavía faltaba mucho para mí. Quizás era mejor dejarlo libre para que fuese feliz... Eso me recordó que debía avisarle que saldría del país por unos días; pero no tenía ganas que el viaje comenzara con una discusión. Así que decidí mandarle un mensaje de texto una vez que ya estuviera en Londres, de esa forma evitaría cualquier enfrentamiento, al menos por el momento.
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Chicas aquí les dejamos un nuevo capítulo de sanando nuestros corazones, disculpen las demoras pero tanto Saris como quien les habla anduvimos bastantes ocupados estas semanas y se nos complico actualizar en tiempo y forma.

Parece que Jake está mostrando la hilacha (perro malo :@)... Creo que el viaje le traerá más de una sorpresa a nuestra Bellita :)

Nos leemos la próxima vez con un capítulo nuevo de Our Love.

Besos
Naty